Ange ou Démon

"No me importa vivir en un mundo de hombres, siempre que pueda ser una mujer en el."

martes, 26 de abril de 2011

Flores

Amo las flores. Son un gesto de delicadeza y refinamiento, a mi parecer. Y si nos fijamos bien, estan presentes en muchos lugares...en la cortina de tu habitacion, el estampado del viejo vestido o el jardin de la abuela. Y no es para menos, la belleza se hace palpable en ellas. Saciar los propios deseos por medio de los sentidos, como decía una vez un gran escritor...

lunes, 11 de abril de 2011

Vestidos

Los vestidos, son mi pasion prohbida.Mi dulce vicio matador. En pocas palabras, son mi prenda preferida. Desde muy lejanos tiempos fueron usados por las mujeres, pasando por los opulentos trajes de María Antonieta, los looks de "amas de casa perfectas" de los años 50, y el mítico wrap dress; pero siempre todas las chicas tenemos por lo menos un vestido en nuestro guardarropa, ¿no es cierto? Se puede lucir mucho mas chic y glamourosa con un vestido haute couture que con una prenda común. Yo apuesto por los VESTIDOS.






El mundo de perlas, cintas, encajes y sedas; ese universo magico y glamouroso que solo el dinero puede comprar, y que solo París y Milan ofrecen, son el sueño de toda mujer.

lunes, 21 de marzo de 2011

Vintage Obsession

She's got Bette Davis eyes... Obsesión por lo vintage, pasión por lo pasado, por la historia que puede tener el sombrero de nuestra abuela. La moda es mujer, y cambia; pero siempre con su estilo marcado y con la misma actitud. Una mujer nunca pierde sus raíces ni le es infiel a sus gustos y convicciones. Somos llamadas las de la intuición, ¿ no?
¡Si! Hay que volver a los viejos tiempos, volar a los 50 y traerlos hasta aquí. Son las huellas del pasado que nos traen tanta nostalgia. Con mis 15 años parece que hubiera vivido mil más, todo se lo debo a la moda, claro. Mi compañera del tiempo.

Todas tenemos algo que heredamos.

jueves, 17 de febrero de 2011

Vogue glamour

VOGUE... VOGUE

Hay que mirar mas alla de los ojos y correr mas lejos que la velocidad, transpasar los límites, tropezar y volverse a levantar.

Como una Holly Golightly, que soñaba con la tienda de Tiffany de la 5º avenida, soy una chica común y corriente; de una ciudad que dista mucho de ser París y un guardarropa que no se parece en absoluto al de Anna Wintour. Pintando castillos en el aire voy por la vida persiguiendo un sueño, y mi arma es el estilo; que no se compra, no se vende ni se regala. Quizá se pueda imitar, pero cada persona en el mundo es distinta, supone una nueva identidad. Nunca puede haber dos estilos exactamente iguales.

Moda es glamour, glamour es estilo, estilo es identidad. El estilo de cada uno nos marca, nos define; es un sello, una cicatriz y moriremos con ella.